Llega el otoño, atrás dejamos una gran variedad de coloridas y exóticas frutas. Aunque bien es cierto, que con los medios actuales (conservas, importadas, inveranderos, etc...), podemos disfrutar de ellas todo el año.Es recomendable consumir las frutas frescas, siendo las de temporada las más sabrosas.
Entonces ¿Por qué no aprovechar entonces la fruta de temporada? he aquí unas cuantas razones para ello:
- Son más sabrosas.
- Su precio es más económico.
- Al ser frescas no llevan conservantes.
Y si estas tres fueran pocas razones, ahí van algunas más:
Naranja
Rica, como es bien sabido, en vitamina C. Además contiene flavonoides y limonoides, que hacen de la naranja una fruta con grandes beneficios antioxidantes, antiinflamatorios y anticancerígenos. Contiene también sodio, potasio y magnesio, útiles para prevenir calambres y fortalecer los músculos.
Madarina
La mandarina es familia de la naranja y también contiene vitamina C, lo que le da poder antioxidante. Es también una fuente importante de provitamina A, que es esencial para la visión. Si no se eliminan las pielecillas blancas de lo gajos de la mandarina, también ayuda a combatir el estreñimiento.
Pera
Existen multidud de variedades de pera que se recolectan durante el otoño. El alto contenido en agua y las pocas Calorías que aporta la ingesta de esta fruta, la hace muy recomendable para las dietas de adelgazamiento ya que tiene un efecto saciante. Rica en fibra, regula el intestino. Aporta vitaminas A, B1, B2, B3, C y E, además de ácido fólico, hierro y potasio. La pera ayuda a depurar el organismo y eliminar toxinas.
Acuérdate de ella esas mañanas tristes que vienen tras aquellas noches alegres.
Manzana
En inglés existe un dicho "one apple a day, keeps the doctor away" que viene a decir "con una manzana al día, en médico ahorraría". Vamos, que la manzana vale para todo. Cruda y con piel, perfecta para combatir el estreñimiento. Rallada y pelada para cortar las diarreas. En compota, cocida o asada mejora la acidez de estómago. Gracias a la pectina y los polifenoles que se encuentran en su piel, ayuda a reducir el riesgo de sufrir enfermedades del corazón, degenerativas y cáncer.
Es asimilada rápidamente por el organismo, por lo que es bueno consumirla tras hacer ejercicio.
Granada
Aunque puede que el consumo de esta fruta no esté muy extendido es un gran diurético por ser rica en agua y potasio. Su concentración de taninos, la hace útil para tratar la diarrea. Tiene una alta concentración de antioxidantes. Se recomienda su consumo para casos de hipertensión arterial, problemas cardíacos y control del colesterol. Es beneficiosa también para personas que sufren de artritis, pues puede ayudar como antiinflamatorio.
Así que no nos olvidemos de añadirla a nuestra dieta, sola o junto a ensaladas, macedonias, etc